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Mostrando entradas de mayo, 2023

“El suéter rojo”

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 “Ese suéter rojo” En esos años, en la Colonia, habían dos escuelas, la Darío González(en jornadas matutinas y vespertina) y la Primero de Julio, que por las tardes se llama Francisco Marroquín, la Adrián Inés Chavez era aún un campo de juego. La alegría de la patojada jugando y retozando, se interrumpida por la escuela. Y allí se veía a los niños por las calles de la colonia, caminando presurosos rumbo a la escuela, unos atravesando los campos polvorosos de fútbol y otros rumbo a la loma. Todos vestidos en blanco y azul, que eran los colores típicos de las escuelas públicas en Guatemala. Eran los años setentas, con todo el colorido de la moda hippie y esa música reflexiva sonando en las radios, tanto en inglés como en español, los jóvenes usando sus pantalones acampanados, a veces exagerados, de cintura baja y las playeras plagadas de leyendas o con dibujos con un Paz y amor. Fue por esos años en que un grupo de maestras de la escuela Darío González, deciden darle un toque diferente,

“Francisco Alfredo Mayen Lu”

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 “Francisco Alfredo Mayen Lu” La nobleza de corazón, no es un título que se posee, es una virtud que se cultiva… Francisco Alfredo, era de esos niños alegres en la escuela, inquieto pero siempre respetuoso de sus maestros y compañeros. El es de esos amigos, que cuando te dan su amistad y te dan la mano ponen el sello de para siempre… Francisco  siempre fue cooperativo y participativo no solo en las actividades escolares, sino también fuera de ellas. Al salir de la primaria de aquella promoción inolvidable de la escuela Darío Gonzales, continuó sus estudios en el instituto Simón Bolívar y años después se graduó de contador. Hace algunos años su esposa fue llamada de este mundo y el continúa profesándole  el mismo amor de siempre, porque en su corazón hay una nobleza que no conoce la tibieza. Oxwell L’bu copyrights 2023  #escueladariogonzalez 

“Silvia Catalina Estevez”

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 “Silvia Catalina Estevez” Aquellos primeros años escolares, marcan la vida, porque es cuando se empiezan a construir los sueños con pedacitos de ilusiones… A Silvia Catalina Estevez, la llamábamos Kathy, era de esas niñas inquietas en la escuela, de las que memorizan la lección y la recitan sin ninguna complicación. Como toda niña, le gustaban jugar con sus compañeras, pero también buscaba la compañía de los varones. Era de los niñas bonitas de la clase, de las que te convencían con una sonrisa y su trato amable.  Siempre andaba corriendo y sus trayéndole momentos a la vida. Oxwell L’bu copyrights 2023 #escueladariogonzale